¿Cómo te tomas los errores? ¿Los aceptas, o por el contrario, te hacen sentir fatal, tanto que a veces los encuentras una deshonra y hasta te sientes un fracasado?
Cuando revisamos el pasado, y en concreto, cuando nos topamos con un error, uno de los sentimientos más habituales que aparece es el arrepentimiento.
Nuestra tendencia natural es a rechazarlo, y a olvidarlo rápidamente, para evitar que nos produzca culpabilidad, angustia, dolor, y otra serie de emociones que no nos hacen sentir bien en absoluto.
Te voy a dar una razón para cambiar esto, ya que con esta actitud, estamos perdiendo unas oportunidades increíbles para crecer.
Mi máxima, y una de los aprendizajes que más me ha cambiado la vida, es que cualquier sentimiento que experimentamos, es un excelente aliado que nos está dando una pista sobre cómo opera nuestro pensamiento. Cuanto más nos duele este sentimiento, más hay en él para aprender.
Por lo tanto, si el arrepentimiento es muy grande, mi sugerencia es que vamos a escucharlo para que nos ayude. En concreto, los expertos han encontrado varios aprendizajes a sacar de él:
En este caso, recomiendo tomar una libreta, y escribir; porque cuando soltamos las palabras a un cuaderno, nuestra mente se libera y nos permite vez con más claridad.
Los errores nos dan una información muy valiosa
En primer lugar, el arrepentimiento nos está dando información, y es clave escucharla para no repetirlo en el futuro. Nos está diciendo que eso que hemos hecho no nos ha beneficiado, que nos hemos equivocado, y por lo tanto vamos a ver qué haremos la próxima vez. También nos está indicando el pensamiento, el programa mental, que nos ha llevado a actuar así, y que nos ha producido un daño, y por tanto hay que ponerlo “en revisión”. Por poco que nos guste, es una lección que seguramente nos ha salido muy cara: a más dolorosa, peor, y por tanto merece aún más reflexión y análisis.
Me atrevo a decir incluso, que cuando actuamos y no fallamos, no estamos aprendiendo. La mayor parte de las veces, lo hacemos por casualidad, y por eso, si queremos repetir el resultado deseado, a veces somos incapaces, pues no tenemos ni la más remota idea de cómo hemos llegado hasta allí. Algunos expertos llaman a esto «competencia inconsciente».
El arrepentimiento es una señal de que hay motivación para el cambio.
En segundo lugar, indica que hay motivación para cambiar, y nos va a dar pistas sobre cómo hemos de actuar la próxima vez, que nos va a llevar a la renovación, y a la generación de soluciones más beneficiosas, y por tanto al aprendizaje y al crecimiento. Si nos lo permitimos, y empezamos a hacer preguntas del tipo “¿qué podría haber ocurrido si?”, esta forma de actuar constituye una herramienta magnífica para desarrollar la imaginación, nuestras habilidades estratégicas, así como la asertividad, si nos pone por un momento en la piel de otra persona.
La incompetencia consciente nos alinea con nuestros principios y valores.
En tercer lugar, cuando nos damos cuenta de nuestros fallos y nuestros errores, esta consciencia nos sirve de brújula, y nos indica si estamos siendo coherentes con nuestros principios y nuestros valores, o por el contrario, si nos los hemos saltado. Este el momento perfecto para «reconducir», hacer caso a nuestro GPS interno y volver al camino. Porque todo lo que sea ir en contra de lo que verdaderamente somos, nos va a hacer sentir mal, y automáticamente, vamos a rechazar repetirlo.
Los investigadores, han encontrado un dato muy interesante: cuanto más arrepentimiento hay, cuanto más insatisfacción y decepción, es porque las posibilidades de cambio son más claras, y por tanto, hay más posibilidades de mejora. A esto lo llaman el PRINCIPIO DE OPORTUNIDAD.
Aunque muchas veces llegamos a pensar que el tiempo lo cura todo, y que si lo ignoramos, esto se solucionará, en el caso del arrepentimiento no ocurre así, pues el mensaje de fondo es que había una oportunidad para mejorar la situación muy importante y no está siendo escuchada. En concreto, las áreas que parecen que más arrepentimiento acarrean son en relación a la educación, a la carrera profesional y al romance, pues son los que presentan más oportunidades de cambio
Por eso, los expertos concluyen que experimentar el arrepentimiento con intensidad, es el ingrediente mágico para producir las transformaciones y encontrar mejores oportunidades en las personas.
Así que la próxima vez que lo sientas, analízalo, es un excelente mensaje que tu subconsciente te está lanzando. Hazle caso, pues las oportunidades de crecimiento que hay detrás son muy importantes. Las personas altamente eficientes, aprovechan todas las oportunidades para salir reforzadas. Cuanto más grande es el fallo o el error, más grande es el aprendizaje. Da la bienvenida al error, falla mucho, falla rápido, analiza las razones por las que fallaste, tantas veces, y así aprenderás más y más rápido.
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